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¿Te has enterado de las asombrosas propiedades que tienen las algas marinas? ¿Quieres saber cómo incorporarlas a tu dieta? En este post encontrarás toda la información que necesitas sobre los tipos de algas marinas comestibles, por qué son beneficiosas para la salud y tres recetas con algas comestibles fáciles y absolutamente exquisitas.

Las algas marinas se han incorporado hace relativamente poco a la cocina occidental, pero son un tesoro bien conocido por muchos países como Japón desde hace siglos. Existen más de 30 variedades de algas marinas comestibles y las tienes a tu disposición frescas o deshidratadas.

Cada alga tiene una composición y unas propiedades distintas, pero, en general, se trata de un alimento muy rico en minerales esenciales como el yodo, el calcio, el fósforo o el hierro y en vitaminas A, B1, B2, C y E. Además, son deliciosas. Aúnan una textura similar a la de las verduras con un sabor marino intenso y original.

Entre las algas marinas más utilizadas, podemos encontrar la espirulina, el espagueti de mar, el nori, el wakame, el dulse, el kombu o el agar agar. La mayoría de ellas son algas marinas japonesas, el país en el que más tipos de algas se consumen y con mayor frecuencia.

Es normal que, sin nunca te has lanzado a preparar algas marinas, al principio te pueda parecer complicado cómo integrarlas en tus platos. Pero te sorprenderá saber que es más fácil de lo que crees, ya que combinan perfectamente con otros muchos alimentos de nuestra dieta habitual.

Para empezar con algo sencillo y rico, aquí van tres recetas con algas marinas comestibles, todas ellas deliciosas:

Ensalada de alga dulse

El alga dulse es de color rojo y es famosa por su elevado aporte de hierro. Su sabor es delicioso y puede comerse tanto cruda como cocinada. En este caso, te proponemos una sencilla ensalada de alga dulse, ideal para combatir la anemia.

Ingredientes:

  • Alga dulse
  • Frutos secos: nueces, piñones o almendras
  • Diferentes tipos de lechuga
  • Ajo
  • Aceite
  • Vinagre
  • Salsa de soja
  • Mostaza

Preparación:

Esta receta es sencillísima. Solo tienes que lavar bien las algas y la lechuga y cortarlas, añadirles los frutos secos troceados y preparar la vinagreta con el ajo, aceite, vinagre, salsa de soja y mostaza al gusto. Mezcla bien las algas y la lechuga con la vinagreta y ¡a disfrutar de esta ensalada!

Blue smoothie bowl

¿Has oído hablar de los blue smoothies? Estos batidos azules con frutas se han convertido en toda una sensación, por su vistosidad, su sabor y sus propiedades. La responsable de darles el color azul es la espirulina en polvo. Un alga considerada superalimento por sus propiedades antiinflamatorias y antioxidantes, debido a su alta concentración de vitaminas y minerales esenciales.

Aquí va una receta de blue smoothie bowl con plátano y arándanos, sencilla, sana y deliciosa:

Ingredientes:

  • 1 plátano mediano congelado
  • ½  manzana
  • ¼ de taza de leche (de vaca o vegetal)
  • 4 cucharadas de yogur natural
  • 1 cucharadita de espirulina en polvo
  • 1 puñado de arándanos
  • 4 cubitos de hielo

Preparación:

Meter en un procesador o batidora el plátano, la manzana, la leche, el yogur, los cubitos de hielo y la espirulina y batirlos bien. Servir en un bol y colocar los arándanos lavados por encima.

Croquetas de algas nori

Pocas cosas hay más tradicionales en nuestra cocina que unas buenas croquetas. Puedes darles un toque especial y original añadiéndoles algas nori. Estas algas son muy conocidas porque son las que se usan, tostadas, para recubrir el sushi, pero también se pueden tomar de muchas otras maneras, como en estas deliciosas croquetas. Son algas ricas en vitamina A y en omega 3.

Ingredientes:

  • Aceite de oliva
  • 2 dientes de ajo
  • ½ cebolla
  • 150 gramos de pescado blanco limpio
  • Cubo de caldo de pescado
  • 2 vasos de harina
  • Sal
  • Agua
  • Medio vaso de alga nori deshidratada
  • Huevos y pan rallado para rebozar

Preparación:

Hidrata las algas nori con agua durante al menos una hora.

Pocha en una sartén el ajo y la cebolla con aceite de oliva. Añade el pescado blanco cocido, el cubo de caldo de pescado, la sal y el alga nori cortada fina y deja que se mezcle todo bien a fuego bajo.

Añade la harina y cocínala un poco. Incorpora agua (mejor si es la de la cocción del pescado) poco a poco hasta que la bechamel adquiera la consistencia que más te guste. Retira del fuego cuando la masa se despegue de las paredes de la sartén y deja que se enfríe.

Haz la forma de las croquetas, pásalas por huevo batido y pan rallado y fríelas. ¡A comer!