Menú

La pandemia por Covid-19 nos está pasando factura a todos, en mayor o menor medida. Llevamos ya un año lidiando con una situación que en muchos momentos nos sobrepasa y que ha provocado cambios importantes en nuestra forma de vida. Es normal que a estas alturas nos sintamos más cansados, desmotivados, estresados o nerviosos de lo habitual. Unas sensaciones o síntomas que son tan comunes en estos tiempos que la Organización Mundial de la Salud (OMS) les ha puesto nombre: fatiga pandémica.

Los meses de confinamiento, las medidas restrictivas para frenar el virus, la pérdida de seres queridos sin poder despedirnos de ellos, el miedo y el estado de alerta constante para evitar contagiarnos, la crisis económica y la reducción de las vías de escape en forma de ocio. Son muchos los factores desestabilizadores con los que tenemos que lidiar en estos tiempos.

Si te sientes cansado, apático, sin ganas de hacer nada o irascible, nervioso y estresado, seguramente estás sufriendo fatiga pandémica. Es importante saber reconocer los síntomas y ponerles remedio antes de que se intensifiquen y deriven en un problema peor.

Es fundamental consultar con tu médico si estos síntomas son graves y te impiden hacer una vida normal. Además, te planteamos algunas tácticas y remedios naturales que te pueden ayudar a sentirte mejor.

Come bien

Una dieta sana y equilibrada es la base de una buena salud tanto física como psicológica. En estos meses de pandemia en los que salimos menos es más importante que nunca que nos alimentemos bien.

Los ácidos grasos omega 3, la fibra, el calcio, el magnesio y las vitaminas del grupo D y E son considerados nutrientes esenciales para el cerebro, que nos ayudan a segregar serotonina y endorfinas, las llamadas hormonas del bienestar y de la felicidad.

El chocolate, las nueces, el pavo, la leche, el yogur, el pescado azul, el huevo, las frutas y las verduras verdes son algunos alimentos ricos en estos nutrientes esenciales, que te ayudarán a sentirte mejor.

Además, la avena es una gran aliada contra la ansiedad y el nerviosismo. Así como las infusiones y complementos alimenticios naturales a base de hierbas como melisa, hipérico, lavanda, verbena, pasionaria, escutelaria, borraja, bufera o damiana.

Haz ejercicio

Las restricciones de movilidad derivadas de la pandemia hacen que nos movamos menos. Además, la fatiga pandémica nos hace tener menos ganas de hacer ejercicio. Sin embargo, si queremos salir de este bucle y sentirnos mejor, es importante obligarse a hacer algo de ejercicio físico al día, aunque sea en casa Al hacer ejercicio producimos de forma natural endorfinas, unas hormonas que nos levantan el ánimo y nos hacen sentir bien.

Busca un hobby

Viajar, ir al gimnasio, salir a comer con familiares y amigos… La pandemia nos ha quitado muchas de las cosas que nos gustaba hacer y que nos servían de vía de escape para la tensión acumulada en el día a día. Y esto puede hacer que nos sintamos frustrados, enfadados y aburridos.

Tener un hobby que nos divierta o relaje es importante para desconectar de la situación tan difícil que estamos viviendo. Por eso, lo mejor es cambiar de actitud y, en vez de lamentarnos constantemente por lo que no podemos hacer, debemos esforzarnos por buscar nuevas actividades que nos hagan sentir bien y que sí podamos realizar. Leer, hacer cursos online, ver series o películas, jugar a juegos de mesa, hacer ejercicio en casa, coser, hacer manualidades… Las posibilidades son muy variadas.

Medita y relájate

La meditación individual o guiada y las técnicas de relajación son herramientas muy útiles para autorregularnos cuando notamos que nuestros niveles de tensión, estrés o ansiedad empiezan a crecer y amenazan con desbordarnos. Existen muchos libros y profesionales que te pueden enseñar y ayudar a meditar y relajarte si nunca lo has hecho y no sabes por dónde empezar.

Desintoxícate

Es bueno seguir la evolución de la pandemia y las restricciones, pero sin que se convierta en una obsesión. La hiperinformación y sobreexposición a noticias negativas genera ansiedad y tristeza, así que lo mejor que puedes hacer es seleccionar muy bien los medios a través de los que te informas (busca siempre fuentes oficiales) y evitar sensacionalismos que no te hacen bien.

Lo mismo ocurre con el contacto con personas que están todo el día hablando de la pandemia y de sus consecuencias negativas, comentando casos tristes y poniéndose en lo peor. Hablar con ellas solo hará que te contagien sus miedos y su ansiedad, así que, si quieres evitar o superar la fatiga pandémica, huye de este tipo de personas al menos durante un tiempo.

Vive el momento

Vivimos tiempos en los que la incertidumbre acerca de lo que va a pasar en el futuro inmediato es muy alta. Y eso nos provoca estrés y ansiedad. Una forma de evitarlo es intentar centrar nuestros esfuerzos, ánimos y pensamientos en el día a día. Vivir intensamente el presente e intentar no adelantar acontecimientos ni vivir siempre preocupados por lo que va a pasar. ¿Conoces el mindfullnes? Es un método que puede resultarte muy útil para vencer la fatiga pandémica. A través de distintas tácticas, el mindfulness busca alcanzar la atención plena en cada momento, centrándonos en lo que sucede aquí y ahora para vivirlo con intensidad.

Y tú, ¿te sientes cansado, irritado, nervioso o irritado? ¿Crees que puedes estar pasando por un episodio de fatiga pandémica? ¿Qué medidas tomas para afrontar la situación?