¿Son los bollos, las galletas o el chocolate compatibles con una dieta saludable? Esta es, sin duda, la pregunta del millón para muchos golosos que quieren llevar una alimentación sana, pero sin renunciar de vez en cuando a un capricho dulce. ¿Te encuentras entre ellos? Tenemos buenas noticias para ti, porque en este post te daremos ejemplos de bollería saludable y dulces que puedes incorporar a tu dieta sin sentirte culpable.
Una dieta equilibrada pasa por consumir todo tipo de alimentos en su justa medida, primando las verduras, frutas, legumbres, cereales, carnes y pescados y reduciendo al mínimo los productos procesados.
Los dulces, como la bollería o las galletas, son alimentos que se deben consumir de forma ocasional, porque además de cereales aportan, por lo general, grandes cantidades de azúcares y grasas que son perjudiciales para la salud si se consumen en exceso.
No obstante, esto no quiere decir que tengas que renunciar a ellos por completo. La clave está en moderar su consumo y optar siempre que se pueda por dulces saludables. ¿Cuáles son estas opciones? Aquí tienes algunos consejos sobre cómo comer bollería y galletas más saludables.
Bollería sin azúcares refinados
El azúcar es un gran enemigo de tu salud. No deberíamos consumir más de 50 gramos al día y casi todos excedemos este límite.
La buena noticia es que para que un bollo o una galleta estén dulces, no hace falta cargarlos de azúcares refinados. Existen alternativas en el mercado mucho más saludables, como el azúcar de abedul o xilitol o la estevia.
Otra alternativa saludable para endulzar las galletas o la bollería es añadirle miel o fruta. Por ejemplo, plátanos maduros o dátiles machacados.
Galletas con grasas saludables
Muchos bollos y galletas industriales están elaborados con grasas que no son nada saludables, como la mantequilla, el aceite de palma y otros aceites vegetales de baja calidad.
Si buscas galletas saludables, asegúrate de que están hechas con aceite de oliva y mejor aún si es aceite de oliva virgen extra, ya que es la grasa vegetal más saludable.
Bollos y galletas integrales
Las harinas integrales son aquellas que conservan las tres partes del grano de cereal al molerse: el salvado, el germen y el endospermo. Son harinas mucho más ricas en nutrientes esenciales y además contienen mucha más fibra que las harinas refinadas, por lo que se digieren mejor y resultan mucho más saludables.
Actualmente es relativamente fácil encontrar dulces hechos con harinas integrales. Además, la legislación obliga a los fabricantes a indicar qué porcentaje exacto de harina integral tiene cada producto, para que no haya engaños. Nuestro consejo es que apuestes por bollería y galletas 100% integrales.
También es aconsejable variar el tipo de cereales que consumimos, para aprovechar sus distintas propiedades. Alterna, por ejemplo, galletas hechas con espelta, trigo sarraceno, avena, maíz o arroz integrales y así tu dieta será mucho más variada y saludable.
El chocolate saludable
¿Qué sería de la vida sin el chocolate? Para muchos, un auténtico infierno. Por suerte, pese a su mala fama, tenemos buenas noticias: el chocolate es saludable. Eso sí, siempre que su ingrediente principal o casi exclusivo sea el cacao puro. El cacao está repleto de propiedades beneficiosas para la salud: reduce el estrés y la ansiedad, mejora el estado de ánimo, ayuda a controlar el colesterol malo, regula la presión arterial, protege la piel frente al sol y mejora la memoria, entre otras muchas virtudes.
El problema es que la mayoría de los chocolates que encuentras hoy en día en el mercado tienen poco cacao y muchos ingredientes añadidos que no son nada saludables, como grasas saturadas y azúcares.
Si buscas chocolate sano, apuesta siempre por los que tengan al menos un 85% de cacao en su composición. Y si vas a utilizarlo para hacer un bizcocho o una tarta, es mucho mejor que compres cacao puro sin azúcar y lo endulces tú de forma natural con fruta, miel, xilitol o estevia.
Así que, ya sabes, no tienes por qué renunciar a los dulces en tu vida, siempre que consumas dulces saludables: con azúcares naturales, grasas saludables, harinas integrales y cacao puro.
Además, ten en cuenta que no solo las galletas, bollería o bombones son dulces. Siempre puedes optar por alternativas como las frutas deshidratadas o las cremas de frutos secos, como la crema de cacahuete, que endulzan tu vida de forma totalmente natural y saludable.
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